El entrenador de la Juventus, Antonio Conte, negó "toda implicación" en el escándalo de los partidos arreglados bautizado como "Calcioscommesse", después de que fuera nombrado testigo asistente y de que registraran su vivienda este lunes.
"Repito que niego toda implicación en este asunto, así como de mis jugadores" del Siena, equipo al que entrenaba en la temporada 2010-2011, investigada por las autoridades.
El fiscal de Cremona, Roberto Di Martino precisó que se estaban investigando "siete u ocho partidos del Siena".
"Hoy (lunes) he recibido una notificación de testigo asistido por asociación de malhechores y han registrado mi casa", admitió Conte en el centro de entrenamiento de la Juventus, en donde leyó un comunicado sin que los reporteros pudiesen realizar preguntas.
El técnico criticó que no haya sido llamado por el fiscal antes de notificarle que está siendo objeto de una investigación. "Me hubiese esperado que al menos se me hablase", dijo.
El presidente de la Juventus, Andrea Agnelli, mostró su apoyo al técnico: "Será nuestro entrenador la próxima temporada".
"También apoyo a Leonardo Bonucci (defensa de la Juventus y de la selección italiana), que está relacionado también con este asunto. Soporta una gran presión pero confío en él para salir de ella y jugar una gran Eurocopa".
Bonucci también será interrogado en una fecha no precisada como testigo asistente, informó la prensa italiana, pero depende de la fiscalía de Bari y no de la de Cremona, cuya actuación condujo a la detención de 19 personas, de ellas 10 futbolistas, y a designar a Domenico Criscito como testigo asistido.
El defensa del Zenit de San Petersburgo fue excluido de la selección nacional después de que la policía le interrogase este lunes en el lugar de la concentración italiana por este asunto.
